LA PRESA DE ENSENADA, BAJA CALIFORNIA

Que días aquellos, cuando en Ensenada se pusieron a construir una presa, fue lo más excitante que vivimos los Ensenadenses. De vez en cuando, íbamos a ver cómo avanzaba tan fabuloso proyecto. 
Cuando se terminó, vimos, cómo a través de los meses de lluvia, se fue llenando de agua. Después alguien tuvo la magnífica idea de sembrar lobinas y mojarritas.

Al poco tiempo,  muchas familias iban  a pescar y a bañarse los fines de semana. 
Mi esposo y yo, que todavía no teníamos hijos, nos llevábamos a todos los sobrinos que podíamos y uno que otro colado. Se divertían muchísimo y los enseñábamos a pescar, les poníamos unos cuantos metros de hilo de pescar con un anzuelo y una lombriz, se los enredábamos a un bote y ¡listo! a sacar pescaditos.

Había gallaretas  y patos de hermosos  colores, verde tornasol con rojo obscuro, que venían del norte a tener a sus polluelos.

Pasó el tiempo y tuvimos a nuestros hijos. Así, que era costumbre, ir los fines de semana a pasar todo el día en la presa. 
Invitábamos a nuestros amigos. Prendíamos una fogata, para freír los pescados y todos nos la pasábamos muy a gusto.

En ése tiempo, mi esposo trabajaba en la Secretaría de Pesca. Y cuando realizaba visitas, a las represas de los lugares cercanos a Ensenada, le pedían, que si podían sembrar peces y les contestaba que sí.

Él y otros tres compañeros de trabajo, sacaban crías de lobina de la presa, con unas pequeñas redes  y las llevábamos a sembrar (digo las llevábamos, porque yo andaba siempre de metiche junto con mis hijos), era una experiencia muy bonita.

Se sembró lobinas, mojarras, rana toro, cangrejo de rio y otros pececitos,  en 2 lugares de San Antonio de las Minas, otro en el Ejido el Porvenir, tres para el  Valle de la Trinidad y dos en Maneadero. 
Visitábamos frecuentemente los lugares, para ver el crecimiento de los peces. Y era un agrado escuchar el ánimo de los pobladores del lugar. Que muchos no sabían, que existían peces de agua dulce. Se les enseñó a pescarlos y a cuidar  su lugar.

Después de varios años, alguien, que no supe quién, sembró bagres en nuestra presa de Ensenada. Crecieron rápidamente y cuando los pescábamos pesaban alrededor de 3 o 4 kilos (muy deliciosos por cierto).

La presa empezó a tener mucho movimiento, porque entrenadores de canotaje, instalaron bollas en línea para practicar su deporte. Así, que mientras pescábamos, era un espectáculo muy agradable ver a los niños y jovencitos. practicar éste deporte al cuidado de sus entrenadores.

En el año 2013, tuvimos la fortuna de tener la sede, de las Olimpiadas Nacionales de canotaje en la presa. Llegaban camiones y camiones de diferentes partes de la república, a participar en las competencias. Fue un evento muy lucido y bonito

Pero un día…    (Hace tres días para ser precisa)

Pasé por el lugar donde está la presa ¡Y no lo podía creer!

¡Nuestra presa estaba casi sin agua!
 Me dio mucha tristeza ver  todo seco.

¡Qué pasó! ¿En donde están nuestros peces, los pescadores, las familias disfrutando el día, nuestros jóvenes practicando su deporte?

¿Donde quedó esa escuela viviente donde podías ver las aves en su ambiente natural? 
Gavilanes, aguilillas, halcones, águilas pescadoras, cormoranes, garzas blancas y grises, gaviotas, sarapicos, pelicanos blancos y grises, muchas especies de patos, gansos, palomas, codornices, gorriones, cenzontles, y muchas especies mas.

¡Que hacen nuestras autoridades!, ¿cómo es posible que la hayan dejado secar?

¡Que alguien me explique!

!!Por favor, por favor, que no la abandonen¡¡

Desafortunadamente, alguien decidió, que era mucho más importante,  mandar agua a unas colonias, unas cuantas horas, durante dos semanas. Que mantener una reserva importante, para que esta maravilla siguiera con vida.

Seguramente, como es normal en nuestro país, no existen bases para ciertas decisiones. Y da tristeza, que  a pesar de que nuestra presa tiene casi 39 años, la comunidad científica, orgullo de nuestra localidad, no le ha dedicado,  un mínimo  de atención (traté de buscar alguna tesis de licenciatura , maestría o doctorado y no encontré nada). En cambio de otros lugares, también importantes, pero mucho más pequeños, si existe infinidad de estudios como la lagunita.
En fin, como ya dije ¡Que alguien me lo explique!

Sé, que nuestro país está pasando por muchos problemas de violencia y de pobreza, pero como dice el dicho, "zapatero a tus zapatos". Que a los que les toca hacer éste trabajo, ¡lo hagan!

Jóvenes biólogos y oceanólogos, luchen por alcanzar sus metas, por realizar, todos esos proyectos e ideas que tenían, cuando estaban en la universidad. No se dejen intimidar, por los dinosaurios que están en el sector en donde trabajan. ¡Brinquen trabas y rodeen los obstáculos! 
Que es la manera en la que se puede hacer algo. Porque, cuando se sembraron los peces hace muchos años, se hizo así, brincando todos los papeleos burocráticos. Si no, ¡jamás se hubieran realizado!. 
¡luchen!,  y algo lograrán. Sé que es pelear contra sansón a las patadas, pero tiene que haber una manera, son jóvenes y tienen una vida por delante,  pueden encontrarle solución a éste problema y a muchos más.

Yo quisiera, que mis líneas, llegaran a los más altos funcionarios. Y nos expliquen qué está pasando y por qué.

Mi sueño sería, ver a mis nietos  disfrutando la naturaleza, aprendiendo de ella  su importancia. Y seguramente esas lecciones, serán transmitidas por generaciones, serán recordadas, con mucho más cariño que otras cosas. Pregunté a mi hijo  - ¿recuerdas cuando tuviste tu primer nintendo?- y respondió vagamente,-será hace 20 o 25 años-. Mas sin embargo, no le paró la boca cuando le pregunté - ¿recuerdas cuando sacaste tu primer pescadito de la presa?-  Me dijo hasta cómo le quitó las escamas.
Pero....  A quién quiero engañar, seguramente la presa de Ensenada quedará, como un puente mas. 

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HASTA LA PRÓXIMA

LA PATRUZKI
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